domingo, 22 de junio de 2014

Fin de semana

  • Es tu voz la que en las noches me acoge, y es tu mirada serena e incorpórea la que me despierta por la madrugada tan desnuda ante el dolor.
  • No te alejes fingiendo no alejarte.
  • No se si quieran tocarte mis versos amargos. No quiero saborear en tu piel mi tristeza, mi desgracia.
  • Le tengo miedo a la nada de mi ser. Le tengo miedo a ser insignificante. No nací para eso, no se si nací para algo, pero no lo quiero.
  • Yo no tengo nada de esta vida, pero esta vida tiene tanto de mí.
  • El problema son tus recuerdos enredados en mis aires, no quiero respirar mi ausencia en ti. No quiero imaginar tus sonrisas anteriores.
  • Que no se me haga tarde, los ojos se me cansan. Corre, sálvate de lo imposible.
  • Mis brazos se tornarán largos, se verán extendidos eternamente hasta el seno de la muerte. Yo diré adiós primero, nadie me sacará de aquí.
  • Despertar en el vacío en reiteradas ocasiones es algo que jamás se hace costumbre.

miércoles, 4 de junio de 2014

Grito confuso

Tengo un dolor cercano al corazón
en el pecho inquieto,
no quiero tocar la muerte,
pero ella goza queriendo tocarme.

La alegría que destilan tus ojos sobre mi cuerpo
me da miedo,
quiero ser quien acaricie tu rostro al despertar,
hoy y siempre,
hasta que toque a la muerte sin que ella lo haga,
mis brazos se harán largos y la tomarán por la espalda,
me aferraré a ella,
así como me aferré a esta vida por tu mirada.

Tengo las buenas intenciones en la piel,
las ansias de compartir contigo los días enteros,
las sonrisas cerca de los labios,
dispuestas a salir cuando te veo.

Tengo la realidad perdida,
o quizás hallada,
a veces no se si soy yo la de este cuerpo,
pero sonrío.

Y pareciera que en tu pecho desnuda,
soy la verdad,
y  pareciera que oculta tras mis propios ojos,
soy un plan llamado a fracasar,
a morir lejos con mi nombre tallado,
a morir como una sábana blanca con el paso de los años.